La vida pública de Grimes siempre ha sido sinónimo de polémica. Podríamos comentar sobre el gran revuelo que generó el anuncio de su relación con el excéntrico Elon Musk allá por el 2018. También podríamos hablar de «X Æ A-12» y «Exa Dark Sideræl Musk», los extraños nombres que eligió para bautizar a sus dos únicos hijos concebidos junto al magnate de origen sudafricano. O también podríamos recapitular las innumerables veces que anunció el fin y reinicio de su noviazgo con Musk en los últimos años resaltando el carácter «fluido» de su relación. Todo este cotilleo es muy real y ha sido impulsado por la misma artista, sin embargo nada de esto debería permitirnos perder de vista la influencia creativa que Grimes ha tenido en la industria musical en la última década.
Desde el estreno de su ópera prima Geidi Primes en 2010, Claire Elise Boucher viene desafíando las etiquetas musicales al crear producciones originales que parecen sacadas «de otra dimensión». Y este no es un simple adjetivo que encontré mientras navegaba en Internet. Al haber dedicado más de 10 años de mi vida a reseñar música independiente, he podido seguir de cerca los éxitos de su carrera y puedo afirmar sin temor a equivocarme que sus creaciones musicales no tienen comparación. El trabajo de Grimes recoge un collage de influencias artísticas under que es difícil de describir: la decadencia del cyberpunk, el esoterismo medieval, la nostalgia del vaporwave, el futurismo distópico de novelas sci-fi como Dune e incluso dosis del anime/arte kawaii asiático. Su deseo constante por estar un paso adelante y ser diferente no solo ha permeado su proceso creativo, sino que le ha llevado a abrazar las nuevas tecnologías que facilitan la distribución de sus contenidos.
En efecto, desde hace ya varios años, la artista canadiense ha emitido diversos comentarios sobre los potenciales impactos de la inteligencia artificial (IA) en la industria musical. Si bien a veces, ella misma se ha adelantado a pronosticar un escenario catástrofico anunciando que el IA provocará «el fin del arte humano» como lo conocemos, la otra gran mayoría de ocasiones se ha mostrado bastante entusiasta sobre sus potenciales benificios. En 2020, por ejemplo, Grimes colaboró con su música y voz en el proyecto de Endel, una startup que utiliza algoritmos para poder crear melodias relajantes personalizadas. Asimismo, a finales de 2021, la artista anuncio la creación de su nuevo proyecto NPC, una agrupación musical con «miembros infinitos» creados todos enteramente por inteligencia artificial y que servirá como «un vehiculo para experimentar con nuevas tecnologías disponibles». FIinalmente, a inicios de este último mayo, Grimes anunció de forma oficial su más reciente proyecto IA, un servicio que promete cambiar la forma de producir música para siempre.
Un nuevo modelo: ‘Voice as a Service’
Hace unos días, la prensa internacional informaba del lanzamiento de Elf.Tech, un servicio basado en inteligencia artificial que pone la voz de Grimes a disposición de cualquier persona en el mundo interesada en utilizar sus vocales en un próximo proyecto. «Los creadores puede subir sus grabaciones acapella en la plataforma […] y luego recibirán de vuelta sus vocales transformadas con el estilo vocal de Grimes A1-1«, explica la nota de prensa que acompaño el lanzamiento. Adicionalmente, por solo $9.99 al año, la misma plataforma se encargaría de subir los nuevos temas creados a las plataformas de streaming de su preferencia . La pareja de Musk no pudo evitar esconder su emoción e incluso fue un paso allá anunciando via Twitterque compartirá 50% de las regalías obtenidas por cualquiera de los hits creados con el software Elf.Tech, aunque también marcó algunos límites :«realmente no me gusta crear reglas, pero tampoco quiero ser responsable de un himno Nazi [o de canciones que hablen] sobre asesinatos de bebes» sentenció.
La noticia se esparció rápidamente en Internet en la última semana y los primeros resultados de este innovador modelo de negocio que por ahora llamaré «VaaS – Voice as a Service» (en referencia a los modelos PaaS, SaaS, IaaS habilitados por la tecnología cloud) han comenzado a hacerse evidentes. Tomen el caso de «In Another Life (Feat. GrimesAI)», una creación de la productora norteamericana Lauren Culjack (más conocida en los circulos del género electropop como Kotomi) que utilizó el software de Elf.Tech para crear en tan solo 3 días la colaboración que anheló toda su vida. «Después de un poco de práctica con su generador vocal» puedo decir que «esta herramienta es increíblemente realista», declaró para la prensa especializada. ¡Y que duda cabe! La calidad alcanzada por este hit esta increíblemente lejos de los improvisados clips con voces IA de Drake y Ariana Grande que se viralizaron en TikTok hace poco. El esoterismo, futurismo y el ambiente post-apocalíptico que normalmente domina las producciones de Grimes se hacen visibles en esta canción con alta fidelidad, y tal parece que este es solo un pequeño adelanto de lo que esta por venir.
En efecto, un usuario en Reddit viene haciendo una recopilación de temas públicos que han sido creados utilizando el procesador Grimes A1-1 y estos ya comienzan a contarse por decenas. Ahi podrán escuchar «On My Mind» de IdiotHooker, un tema de influencias vaporwave, y «Ether» de Nick Webb un tema que me hace recordar al dark rave de Crystal Castles. Esta nueva herramienta es una verdadera fuente de posibilidades infinitas que nos deja con más preguntas que certezas. ¿Cuántas canciones que suenan a Grimes podrían obtenerse diariamente en el mundo? ¿Cuantas de estas podrían convertirse en hits y traducirse en una fuente de ingreso segura para Grimes y sus colaboradores? ¿Será que esta nueva herramienta podría ser usada (en manos equivocadas) para fines no éticos?
Solo nos tocará esperar un poco más para ver el desenlace de esta historia que parece sacada de un libro de ciencia ficción. Desde luego, también será interesante observar la respuesta de los sellos discográficos, quienes no parecen ver con buenos ojos este nuevo avance tecnologico en su mercado y de hecho vienen solicitando a los servicios de streaming como Spotify y Apple Music que bloqueen sus catálogos frente al inminente acecho de las compañías de inteligencia artificial. Una nueva era ha empezado: «Grimes es ahora open-source y se viene replicando a sí misma», estan todos advertidos.